¿El divorcio daña a los hijos/as?

Me sorprende que aún en estos tiempos se siga divulgando la idea de que el divorcio daña a los hijos y las hijas. ¿Por qué se habla así? En primer lugar ¿por qué se divorcian o se separan las parejas? Y ¿por qué habrá de dañar a los hijos?

Es increíble que a estas alturas se siga creyendo que la "familia tradicional" es lo mejor. ¿Siempre? ¿Sin importar las circunstancias? ¿A quién le convienen estas ideas? Aunque sean bien intencionadas no creo en ellas. Hay muchos tipos de familias que pueden estar unidas y sentirse bien y donde las criaturas son amadas, están cuidadas y apoyadas 

¿Cómo le va hacer bien a los niños y niñas ver a la pareja discutir constantemente, insultarse e incluso golpearse? ¿Cómo le va ayudar a los hijos ver a la madre maltratada, cargada de trabajo, sin el apoyo de su pareja la mayor parte del tiempo? ¿Qué mensaje van a recibir esos niños y esas niñas al ver a sus padres juntos en una indiferencia total alternando con discusiones  porque uno de ellos o los dos tienen una relación oculta o no tanto? ¿O simplemente estar juntos indiferentes porque ya no se quieren? 

¿Porqué haría daño la separación? Generalmente se culpa a la mujer de la separación. Ella no tiene la culpa ni es responsable, porque cuando lo hace, ya no hay matrimonio. La "culpa" en todo caso es de la irresponsabilidad, la infidelidad, la violencia, la falta de respeto, el abandono. Si ambos madre y padre estuvieran al pendiente de los hijos aunque no vivan con ellos, otra cosa sería, pero ¿qué es lo que suele pasar? Si la madre decide separarse, la mayoría de las veces el padre se aleja y no vuelve a ver a los hijos o les manda dinero de vez en cuando o los acerca o aleja según pueda manipular a la madre. Si la iniciativa de separarse es del padre, y se va, nadie lo acusa de ser mal padre ni de abandonado de hogares ni de destrozar familias ni de nada, ¿por qué? No se vale. Y no quiero que lo culpen, sino que sean parejos, si a él no lo culpan tampoco a ella...

 Las mujeres a veces me dicen que no se quiere separar a pesar del maltrato para "no quitarle el padre a sus hijos". No les puedes quitar el padre a tus hijos/as ni aunque te separes de él. Él siempre va a ser su padre para bien o para mal. De él depende si mantiene o no una relación con sus hijos. Una cosa es la relación de pareja y otra la de los hijos y ésta se puede mantener muy bien unida o separada la pareja según las circunstancias. Claro que para algunos varones la relación con  la mujer es lo que cuenta y a veces invitan a los hijos solo para ver a la mujer y si esta dice no, despachan a los hijos en media hora porque siguen creyendo que los hijos es chamba de la mujer.

Las más de las veces los padres hacen poco, la madre tiene que trabajar soportando la culpa de que "abandona" a los hijos. Y esto no es porque los padres sean malas personas sino porque desgraciadamente, por muy "avanzada" que esté la sociedad en estos tiempos, aun sigue creyendo y mandando mensajes de que los hijos son de la mujer y que con llevar dinero, el padre ya cumplió. Y llevar dinero, lo que sea, no lo necesario. Recuerdo una mamá que se divorció y el abogado le dijo al ex marido, "hay cuando puedas le das unos 200 pesos" me decía ella, y a mi nadie me dice "hay cuando puedas les das de comer" los niños comen todos los días y yo tengo qué ver cómo le hago y encima me acusan de abandonarlos o de ser mala madre. Me lo decía con lágrimas en los ojos, lágrimas supongo de impotencia...

Si unos padres se separan qué ejemplo están dando, se me ocurren muchas posibilidades: enseñar a los hijos que es mejor separarse que estar ofendiéndose y maltratándose, que quieren tranquilidad y paz para los hijos. Si la madre es la de la iniciativa, enseñará que no se vale que te maltrate, que es mejor alejarte porque nadie merece ser maltratada, que eso no es amor, que se puede vivir de muchas maneras, que se vale empezar de nuevo, y muchas cosas más. Los niños varones pueden aprender el costo de la falta de respeto o del maltrato.

Claro que hay de todo en la viña del Señor y hay padres que mantienen el contacto con sus hijos siendo responsables, y hay madres que se van (las menos y más rara vez) dejando a los hijos con el padre. Y cuando me llevan a los niños les explico un poco esto y hasta le agrego que su padre sabía que su mamá haría todo por ellos y se confió y muchas cosas más que ya escribí cuando escribí de  "los padres" hace ya algún tiempo.

Mi intención al escribir hoy es desmentir las ideas tan populares de que el divorcio daña a los hijos. He visto muchas veces cómo los niños y niñas se van para arriba, es decir, mejora su ánimo, rendimiento escolar, etc. tras la separación y cómo reconocen que hay más paz y tranquilidad, menos gritos y pleitos y que están mejor así. A veces papá y mamá logran llevarse mejor. En todo caso, lo que puede hacer sentir mal a los hijos es la idea de que "ya no son una familia normal" basada en las ideas tradicionales. Cuando vemos que se llevan mejor, que van saliendo adelante a pesar de las dificultades, que se sienten más tranquilos/as y contentos/as les pregunto ¿quién tiene derecho a decir que tu familia no es normal si a ti si te gusta y te sientes mejor que antes?

La vida

Me gusta la vida, me asombra, me da ternura, me maravilla.

La veo en todos lados, en las plantas, los animales y no se diga en las personas.

Me gusta como la vida se aferra. Lo veo en troncos talados a los que les sale una ramita verde nueva, delgada, chiquita y dispuesta a crecer.

Lo veo en los animales. En los pájaros cómo cuidan a sus crías. Los chanates cómo hacen arguende cuando un polluelo está en peligro y están dispuestos a lo que sea para protegerlo aunque sepan que no podrán devolverlo al nido, lo cuidan mientras pueden.

Lo veo en las palomas empollando, tomándose turnos no se si entre ave macho y hembra o si solo serán adultos cuidando el huevo. Se angustian o al menos eso parece, si el huevo se mueve y está en peligro de caer del nido.

Lo veo en los gorriones haciendo el nido y alimentando a los polluelos. 

En mamá gata cuidando y protegiendo a sus crías, esponjándose para lucir feroz si alguien se acerca a sus mininos. Los veo en los gatitos bebés, escondiéndose si algo perciben como amenazante. En los cachorros de la perra aferrándose a la madre para comer y mantenerse calientes. A esas madres animales buscando cómo alimentar y mantener con vida a sus crías.

Lo veo en los animales bebés, luchando por vivir, a veces callejeros, a veces en vídeos de especies tan lejanas.

Me gustan esos bebés aprendiendo a vivir, experimentando, jugando, inocentes, chiquitos. También los humanos bebés, que coinciden en muchas cosas, al principio de su vida, con la de los animales.

Y lo veo en las personas, que van creciendo y madurando, saliendo adelante, buscando su forma preferida de vivir, a pesar de las circunstancias, a pesar de los mandatos sociales, algunos tan tan rígidos...

Me gusta en las personas a cualquier edad, intentando a su manera, vivir lo mejor que pueden de acuerdo a lo que consideran valioso, a sus convicciones, intenciones, a sus quereres, equivocadas o no... Total ¿quién no se equivoca?

Me gusta la vida y me gusta mucho. La veo en todos lados.
Se que la muerte está al parejo y también la veo en todos lados, también las plantas y los animales me enseñan a cada rato sobre la muerte, me enseñan a aceptarla, a no temerle, a entender que si hay vida hay muerte y si hay muerte primero hubo vida.
Si, me gusta mucho la vida, me parece simpática, me da ternura, me asombra me maravilla.